La otra reforma electoral
La reforma electoral, si se aprueba, indica que los estados mayores a 1 millón de habitantes tendrán derecho a 15 diputados locales, y por cada medio millón adicional, uno más. A Sonora le tocarían entre 17 (si son 2 millones de habitantes) o 19 (si son 3 millones).
Además, ya no se votaría por candidatos, sino por los partidos que registraran listas con esos 17 o 19 aspirantes al Congreso local, y luego de la elección, de acuerdo al porcentaje de votación que cada partido obtenga, asignarle el número de curules que le toquen, de tal forma que en el 2024, el congreso podría estar integrado por diputados de 1, dos o hasta 3 partidos, y la mayoría quedarían sin representación en el Congreso. La reforma electoral NO contempla darle una curul a cada uno que obtenga más del 3 por ciento de la votación general, sino repartirlas, las curules, entre los partidos que mayores porcentajes obtengan.
También reduce el número de regidores en los ayuntamientos. Hermosillo tendría un máximo de 9 regidores, junto a Cajeme, y de ahí el resto ocho, 7 y así, hasta un mínimo de un regidor para los mpios pequeños.
Hay mucho material digno de análisis en la propuesta de reforma electoral, más allá de solo hablar de la desaparición o no del INE.
En este tema ¿cómo se decidirá que 7 consejeros conformarán al INEC, en caso de ser aprobada la reforma electoral?
El Ejecutivo (AMLO directo, especifica la reforma) propondrá 20 perfiles, mitad hombres y mitad mujeres.
El legislativo otros 20, 10 la cámara baja y 10 la alta.
Y el Judicial los últimos 10, para un total de 50 aspirantes a ser consejeros en el INEC, de los el primer domingo de agosto próximo, nosotros, el electorado, elegirá a 7.
Ganarán los 7 con mayor número de votos, sin contemplar la equidad de género en la designación final.
Redacción de Gilberto “mensajero” Armenta